Author:
P. de S.
Title:
EL CONCIERTO DE LA TUNA.
Publication:
Museo Internacional del Estudiante, 2009.
Original edition:
El Lábaro.
Date:
Sábado, 22 de febrero de 1908,
p. 1.
Mientras tú
duermes, lector, yo tramo contra nuestro amigo el cajista, esta
pequeña conspiración de cuartillas y tinta, para contarte en ellas y
con ella, lo que anoche viste y oíste. Qué quieres; el oficio es así
de extraño y en estos casos se reduce a decirte un poco de lo que
tú bien sabes. Un ramillete de flores y un rato de música bien vale
la pena de hurtarle yo una hora al sueño, y un momento tú a otros
más trascendentales asuntos.
Atiende, lector,
que la música dice cadencias, y las flores dicen amores, y las
risas dicen promesas. Y si no tienes alegría en el alma, sigue el
revolotear de una hoja seca, que los aromas dan envidia, y aunque es
lenitivo el recordar, más es triste y melancólico.
No busquemos
primores de ejecución: ni sé si los hubo, ni me importa saberlo. Eso
los maestros que esta noche escucharemos. Pero hay ambiente en estas
fiestas estudiantiles. Alegría y simpatía. Un poco de desperezo del
espíritu que se subleva en franco rebullir. Por eso tal vez estarían
bien, lanzadas a tiempo, las gotas de ironía burda caídas de las
alturas: menos copiosas, es claro, y mas sutiles.
De cualquier
manera, ambiente quieren todas las cosas y silencio respetuoso de
enamorados de la música, tendrémoslo esta noche en el concierto de
la Filarmónica.
Dígote, lector,
echando mano del cajetín ordinario que el amigo cajista procura no
distribuir, que la Tuna Escolar se presentó anoche al público y que
el público gustó mucho del concierto, porque los tunos hicieron
alarde de dotes musicales y dieron prueba de acertada dirección.
Como números
salientes del programa, merecen citarse la Rapsodia montañesa,
ejecutada por el director de la Tuna, D. Eloy Andrés, acompañado al
piano por D. Hilario Goyenechea.
El pasodoble
Salamanca Oporto, original del Sr. Andrés, agradó muchísimo,
siendo muy aplaudido.
Asimismo lo fue el
vals Boston, del Sr. Goyenechea, Una sonrisa, que le valió a
su autor los honores de la escena, a la que fue llamado por el
público.
Otro número que
también gustó muchísimo fue la Playera y zapateado, de
Sarasate, tocado a violín y piano por los Sres. Andrés y Goyenechea.
Los panderetólogos,
en la jota de Congreso feminista lucieron su destreza un poco
exageradamente.
*
Un aplauso para el
aventajado alumno de la Facultad de Derecho, D. Germán Azpiunza, que
repitió con gran fortuna los juegos de manos y prestidigitación,
haciendo alarde una vez más de su disposición y maestría. Este
número resultó entretenidísimo y el público aplaudió el trabajo de
este aficionado prestidigitador. El Sr. Samaniego no pudo
acompañarle en los juegos por continuar enfermo.
*
Hizo la
presentación de la Tuna su presidente D. Benito M. Valencia. Su
discurso fueron breves palabras de salutación al público y todo él
impregnado de la galantería peculiar suya.
A mi me gustó el
discurso de Valencia, como me gustó la Tuna, y como me gustó la
prestidigitación. Y contento de todo... suenan las dos, yo me
duermo. Hasta luego que te encontrarás conmigo, amigo lector.
P. de S.