
Author:
Anónimo.
Title: LA TUNA ESCOLAR SALMANTINA EN ZAMORA.
Publication:
Museo Internacional del Estudiante, 2009.
Original edition:
La Gaceta Regional.
Date:
Lunes, 27 de enero de 1930,
p. 3.
EL RECIBIMIENTO.- GRAN
VELADA EN EL NUEVO TEATRO.– CONCIERTO DE LA CORAL.– BAILE EN EL CASINO.–
OTROS ACTOS
El pasado sábado hizo
su primera salida la Tuna Escolar Salmantina, llevando la música de su
serenata, a la vecina capital del Duero, donde se esperaba con cariñosa
simpatía. En Zamora existe una gran predilección por la música, acaso
fomentada por la labor de continua superación que está llevando a cabo
su Coral, una de las mejores con que cuentan las ciudades castellanas.
Por eso creemos que fue grande el acierto de los directivos de la Tuna,
al elegir a Zamora como escenario donde ofrecer al público las primicias
de una labor callada y serena con la que los “tunos” han conseguido
constituir una agrupación de notable mérito.
El éxito obtenido por
la Tuna escolar, ha sido, en verdad, grande y merecido. Por ello
felicitamos a cuantos elementos la componen, deseándoles que sigan
obteniéndolos en sucesivos conciertos, como prometen, dados los valiosos
elementos que la integran.
LA TUNA ESCOLAR
He aquí los elementos
que integran la Tuna Escolar Salmantina.
Director, don Castor
Iglesias Pollo, director de la Banda provincial.
Abanderado, Andrés
Torres.
Postulantes: Juan
Vargas, Angel Madrazo, José Luis de Bustos y José Luis Figuerola.
Panderetas: Francisco
de Basabé, Carlos Velasco, Manuel Poladura y Manuel Castro.
Hierros: Remigio Diego.
Bandurrias: José
Guerrero, Máximo Prieto, Manuel de Castro, Francisco Sánchez, Cipriano
Torrecilla.
Laúdes: José Arroyo,
Carlos Hernández, José Martín y Domingo Romo.
Guitarras: José de
Basabé, Santos Rodas, Emilio Muñoz, Fernando Moretón, Fernando de
Bernardi y Alfonso Sánchez Montero.
Violines: Guillermo
Hernández, José Arroyo, José Conejo, Manuel Luengo, José Población y
Santos Rodas.
SALIDA DE SALAMANCA
De Salamanca salieron
los “tunos” el sábado a la una de la tarde, llegando a Zamora,
aproximadamente, a las tres y media. El viaje lo realizaron en dos
grandes automóviles de línea.
En el camino, los
escolares obsequiaron a los chóferes respetables con canciones que
alegraban algo el ánimo, pues el tiempo que se presentaba, a medida que
nos acercábamos a Zamora, amenazaba chaparrón inminente.
Fueron dos horas que se
pasaron agradablemente.
EN ZAMORA
A la hora antes
indicada, la Tuna Escolar hizo su entrada en Zamora, siendo recibida por
los miembros de la Coral y por los de la Colonia salmantina. Después de
los saludos de rigor, se organizó la comitiva, que entró por la calle de
Santa Clara, siendo aplaudida sin cesar por el público que se asomaba a
balcones y ventanas al paso de la estudiantina.
Primeramente marcharon
los tunos, tocando el bellísimo pasacalle “A la Tuna”, del señor
Iglesias, al Ayuntamiento, donde fueron recibidos por el alcalde, señor
Gil y Angulo; el secretario, señor Prada y varios concejales. El señor
Gil y Angulo, dio la bien venida a los estudiantes salmantinos,
felicitándose de que fuera Zamora la primera ciudad visitada por la Tuna
Escolar.
Los tunos fueron
obsequiados espléndidamente.
Desde allí marcharon a
cumplimentar a las restantes autoridades, entre ellas, el Gobernador
civil, siendo objeto en todas partes de manifestaciones de afecto y
simpatía.
Desde el Gobierno
civil, marcharon los tunos al domicilio de la señorita María Peñaloso,
presidenta de la Tuna, donde después de ser obsequiados con toda
esplendidez, se organizó un baile animadísimo, al que concurrieron
bellas señoritas.
El baile duró hasta
cerca de la hora del concierto, en que las tres señoritas presidentas de
la Tuna, fueron conducidas al teatro, en un coche, gentilmente traído
por los postulantes José Luis Bustos, José Luis Figuerola y Angel
Madrazo.
Durante su estancia en
Zamora, los tunos fueron acompañados por los miembros de la Colonia
salmantina, entre los que recordamos a don Tiburcio de la Flor, don
Angel Ledesma y don Federico Miró.
También les acompañó el
presidente de la Coral zamorana, señor Haedo.
ASPECTO DEL TEATRO
A las siete de la
tarde, hora en que estaba anunciado el concierto, ofrecía la sala
elegante del Nuevo Teatro, un aspecto brillantísimo, imposible de
referir.
Todos, absolutamente
todos los palcos, estaban ocupados por encantadoras señoritas zamoranas,
cuya espléndida belleza realzaban de manera soberbia la elegancia de la
sala, en los momentos del concierto. En los antepalcos habían sido
colocadas numerosas banderas y colgaduras.
Algunos palcos eran
ocupados también por las autoridades.
La sala del teatro
estaba ocupada por selectísimo público de todas las clases sociales, que
rendían así un tributo de cariño a Salamanca. Veíanse numerosos miembros
de la Colonia salmantina, quienes habían recibido triunfalmente a la
Tuna Escolar, a su llegada a la capital vecina.
Momentos antes de dar
comienzo al concierto, llegaron al palco las presidentas, que eran las
gentilísimas señoritas Marujita Peñalosa, Lolita Milán y Tránsito
Prieto, las cuales fueron recibidas por el público con aplausos y vivas
atronadores.
Al levantarse el telón,
apareció la Tuna Escolar, ocupando cada cual el puesto que previamente
le había sido destinado.
Con los “tunos” se
hallaba también en el escenario, el presidente de la Colonia Salmantina
de Zamora, señor Calama, que fue el encargado de hacer la presentación.
EL PRESIDENTE DE LA
COLONIA SALMANTINA
Al levantarse a hablar,
es saludado con una gran salva de aplausos. De su discurso, dicho con
palabras fácil y lisa, son los párrafos siguientes:
Señoras y señores: como
presidente de la Colonia Salmantina de Zamora, tomo la palabra para
ofrecer mis respetos, en primer término, a las autoridades, saludar a
las presidentas y damas de honor de la Tuna Escolar Salmantina y saludar
también al público que ha querido dar a los forasteros y amigos que hoy
nos visitan, una cumplida prueba de que Zamora y Salamanca siguen
compenetradas espiritualmente como siempre lo estuvieron en la Historia.
Y en segundo lugar, son
mis palabras de presentación de la Tuna Salmantina, que ha querido
responder con su visita a la que no hace mucho le dedicó la Coral
Zamorana, recibida triunfalmente por el público de la ciudad vecina.
Para la Coral Zamorana, para las autoridades todas y para el público que
ha tenido para estos escolares tantas atenciones, mis mayores gracias,
porque aquéllas demuestran que subsiste aún el glorioso timbre de
hidalga que siempre tuvo la histórica y legendaria ciudad de Zamora.
Para todos, mis gracias más rendidas, que van envueltas en íntimo gozo,
porque, aunque salmantino y amante de mi patria chica, yo quiero también
a Zamora, ciudad hidalga siempre, sobre la que no ha pesado ni pesará
jamás estigma alguno.
Quiero ser breve,
amigos. Bien venidos seáis a esta legendaria ciudad de Zamora,
estudiantes de Salamanca, la gloriosa ciudad, emporio de la Ciencia, por
donde desfilaron tantos y tantos sabios que dieron brillo inmortal a sus
piedras de oro.
Venís, ciertamente a
vuestra casa, porque nunca como ahora podrá decirse que todos somos
hermanos. Lo somos porque Zamora y Salamanca lo fueron y lo son todavía,
ya por analogías, ya por reciedumbre espiritual.
Y con el saludo, vivan
también unas frases de elogio caluroso para vosotros, en quienes está
cimentado el porvenir venturoso de la Patria, España tiene en los
estudiantes, jóvenes al fin, no el robusto brazo vigoroso y potente,
sino el cerebro privilegiado de donde cabe esperar días de gloria para
la Nación entera. ¡Albricias, queridos escolares, albricias! Vuestros
cantos y vuestras sonatas, formarán, como guirnalda que unirá más
estrechamente aún a vuestra ciudad y a la nuestra, en un abrazo
espiritual y fuerte, como sólo saben dárselo las ciudades castellanas.
Y para terminar, un
ruego, estudiantes. La Patria os necesita porque sois como la vanguardia
que descubrirá nuevos horizontes espirituales. Sin vosotros,
ciertamente, el mañana no tendría objeto ni ofrecería posibilidad alguna
nueva a los ojos de los que vinieran. ¡Estudiantes! Escuchad siempre.
Sed fieles a la divisa que siempre fué patrimonio de todo escolar digno
de llevar ese nombre y haceros dignos del agradecimiento unánime de la
Sociedad, de la Patria chica y de la gran nación española.
Estruendosos aplausos
pusieron fin a las postreras palabras del Presidente de la Colonia
Salmantina de Zamora.
EL PRESIDENTE DE LA
TUNA
A continuación, el
señor Vargas, presidente de la Tuna Escolar Salmantina, se levantó a
hablar, siendo saludado con una estruendosa salva de aplausos.
El señor Vargas,
después de unas discretísimas palabras, hizo la presentación de la Tuna
escolar, dando lectura a las siguientes cuartillas:
Zamoranos de nuestros
afectos, bellísimas señoritas, compañeros del amor: La estudiantina
pasará pero adueñándoos vosotros de nuestro espíritu escolar, del
sentimiento de nuestra propia juventud. Venimos de la ciudad de las
piedras de oro a pasar unas breves pero agradables horas en esta
acogedora ciudad hermana, también de piedras de oro, que hablan del
heroísmo de mujeres castellanas de hondo sentir y pensamiento elevado
que, como Urraca y María la Brava, dejaron huella de amor patrio, que
vosotros y nosotros sabemos sentir.
Grandes han sido
vuestras bondades exteriorizadas hoy al cruzar estas históricas calles
que recuerdan a cada paso los títulos y mercedes que os entregaron Reyes
y príncipes, y el recuerdo de su emoción, embalsamada el ambiente del
optimismo que baña la esperanza de nuestros años mozos.
Zamora es Salamanca.
Salamanca es Zamora.
Vuestro Viriato
defendió la libertad de que nos habla la Historia y hermano fue en
sentimiento protector de multitudes de nuestro comunero Maldonado.
Vuestras bellísimas y
simpáticas mujeres, hermosas son en belleza y virtud de las nuestras. Y
es que ya no hay fronteras provinciales, donde manda el corazón.
Somos Castilla. Ahí
están como heraldo del arte castellano, las filigranas de nuestra
soberbia Catedral, de la Magdalena, de San Vicente del Tránsito, del
Palacio del Momo, que pregonan arte, hermanado con el de Sancti-Spíritus,
Casa de las Conchas, Palacios de Monterrey y Plaza Mayor.
Autoridades de todos
los órdenes, escolares amigos, zamoranos todos, periodistas, gracias,
muchas gracias y gracias siempre, por vuestras atenciones y agasajos.
Señoritas zamoranas:
para vosotras, en el final de nuestro reconocimiento, nuestro mayor
tributo de gratitud y admiración. Muchas de vosotras sois como nosotros
estudiantes, estudiantes de una vida que no podría existir sin la gracia
de vuestras sonrisas, sin el puro comentario que siempre tenéis a flor
de labio, de esos labios de expresión dicharachera, de esas miradas que
sin hablar, dicen tanto que es la lección que mejor sabemos aprender: la
lección del amor...
Felices seáis, encantadoras señoritas, felices y dichosas os
queremos ver a la vera de nuestras simpatiquísimas presidentas Mariquita
Peñalosa, Lolita Milán y Tránsito Prieto.
¡Viva Zamora!
Una atronadora salva de
aplausos, consumó las palabras finales del discurso leído por el
presidente de la Tuna.
EL CONCIERTO DE LA TUNA
Acto seguido, comenzó
el concierto con que la Tuna Escolar obsequiaba a sus bellísimas
presidentas, las cuales procedieron antes, a imponer a la bandera de la
Tuna las corbatas que para ella habían bordado.
Comenzó el concierto
con el pasodoble “A la Tuna”, del que es autor el director de la Banda
Provincial, don Castor Iglesias. Este pasodoble tocado por los Tunos
muchas veces en Salamanca, donde consiguió llamar la atención, fue
aplaudidísimo en Zamora, cuyo público se adueñó muy pronto del motivo
musical que constituía la base del pasodoble.
Después se tocaron las
siguientes obras: “Las maravillosas”, mazurca, de Soutollo y Vert.
Andante de la “Canatión”,
en sol, Mozart.
“Los bullangueros”,
fado Jacinto Guerrero.
En todas ellas, la
Tuna, en la que a no dudar hay buenísimos elementos, se portó
admirablemente siendo muy aplaudida.
Comenzó la segunda
parte con un intermedio cómico a cargo de “Les-Tay-Ber”, solistas de la
Tuna, luciéndose, sobre todo el señor Bernardi, que hizo unos juegos de
manos imitación Ramper de una limpieza y precisión maravillosas.
El público le llamó
varias veces, teniendo el señor Bernardi que repetir algunos números.
Luego vino la segunda
parte del concierto, tocando la Tuna Escolar.
1.º “Pulgarcito”, Vals,
de H.
2.º “La Fidista”, fado,
de L. P.
3.º “Jota aragonesa”.
Y como final, en vista
de los insistentes aplausos del público:
“Flor de Mayo”, tango,
Gustavo y José María Martínez.
“Fandanguillo de
Almería”, G. Vivas.
“Estampa”, pasodoble,
de A. Fernández.
Esta última pieza, hubo
de ser repetida, pues el público la pidió así con aplausos clamorosos,
haciendo objeto a la Tuna Escolar Salmantina, de una triunfal despedida,
como corresponde a la estrecha compenetración que siempre ha habido
entre las dos ciudades hermanas.
El público, puesto de
pie, dio vivas estruendosos a Salamanca, contestando la Tuna y la
colonia Salmantina con vivas a Zamora.
SERENATAS DEL DOMINGO
La mañana del domingo,
la dedicaron los “tunos” a obsequiar con serenatas a las autoridades y
familias distinguidas de Zamora, siendo en todas partes muy obsequiados.
CONCIERTO DE LA CORAL
Por la tarde, después
de las serenatas, los tunos fueron obsequiados con un concierto por los
elementos coralistas, quienes habían sido citados oportunamente, por su
director señor Haedo.
Los coralistas
cantaron, como ellos saben hacerlo, varias obras regionales, siendo
escuchados, no sólo por la Tuna Escolar, sino por numeroso y selecto
público, que había sido invitado.
La Coral fue
entusiastamente aplaudida.
BAILE EN EL CASINO
Por la noche se celebró
el baile anunciado en el Casino, resultando extraordinariamente
brillante, pues allí se dio cita lo más granado de la Sociedad zamorana.
Es tarea realmente imposible, dar los nombres de todas las bellísimas
señoritas que acudieron al Casino. Baste referir que eran representación
cumplidísima de lo más selecto de la capital vecina.
El baile duró hasta
bien entrada la madrugada, no decayendo la animación un solo instante.
A la Tuna Escolar
salmantina, se le tributó una cariñosa despedida.
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NOTA: Artículo
procedente de investigación original inscrita con el número SA-120-02 en
el Registro de la Propiedad Intelectual. La presente edición ha sido
normalizada y corregida para evitar el uso no autorizado de la misma.
Todos los derechos reservados.
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